martes, 22 febrero 2011
Última parada
Ya un mes solo en Ginebra. Por fin sin Masha, su esposa rusa, huida con un joven amante bohemio. Nueva vida de rica lejos de él. ¿Costa Azul, París o Cochinchina? Sin interés. Hijos indiferentes y ausentes. Aburrimiento por peleas viejos esposos. Zacarías insoportable desde jubilación. Abandono actividades. Adiós tenis, golf, esquí, violín, ajedrez, viajes, cine, fotos, colección de piedras. Adiós amigos. Ahora quijote moderno. Escritura autobiográfica interminable. Loca dactilografía en PC incesante de mañana a noche. Poca comida. Primero Masha comprensiva consecuente. Paciente...