sábado, 08 marzo 2014
Página en blanco
Nora se sentó un momento a descansar de la mudanza en medio del desorden de su nueva casa para escribir aunque fueran las primeras líneas de un cuento. Se puso a oír música de flauta andina con auriculares para aislarse del ambiente nefasto y encontrar la inspiración. No le salía nada. Pensó escribir sobre la odisea de su mudanza y todas las cosas encontradas tras años de haberlas olvidado guardadas. Empezaba un relato y a media página le parecía tonto, rompía en pedazos la hoja y la tiraba a la papelera. «Quizás si descanso una semana, todo saldrá bien», se decía. Se levantaba a...