lunes, 29 noviembre 2010
A mitad de viaje
Casi veinte días fuera de casa que parecen más. Lo que ha estado muy presente desde la llegada a Colombia ha sido la lluvia. Casi a diario llueve: chubascos, lloviznas y tormentas se suceden con intervalos de sol. Es natural que haga frío en Bogotá a 2600 m de altitud; lo raro es que no tuvimos calor en la Tierra Caliente mucho más abajo, entre 800 y 1400 m. Muchos campos inundados, derrumbes y damnificados. El vuelo de Ibagué a Bogotá salió con una hora de retraso pues algunos aeropuertos estuvieron cerrados por mal tiempo y el tráfico aéreo se represó. He oído decir que el invierno...