domingo, 22 agosto 2010
Otro punto de vista
Me encanta sentir que soy yo quien lleva la batuta. ¡Cómo no! Hay música que me encanta, otra que odio y otra que me es indiferente. Me gusta sobre todo durante los festivales de verano al aire libre con un clima agradable, ni frío ni calor, viendo llegar la noche suavemente. Delante de una gran orquesta, con una bonita cantante a mi lado, los violines que bailan ante mí, los instrumentos de cuerda que van de maravilla con la voz humana, los instrumentos de percusión que dan ritmo al conjunto. Lo malo es que dependiendo del director puedo pasarla muy mal. Unos enérgicos me marean con...