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jueves, 27 enero 2011

No solo de tecnologías vive el hombre

humor,tecnología

-      Ahora que estamos en la India de vacaciones, vas a ver lo útil que es tener este teléfono móvil de última generación.

-      ¡Tú y tus manías tecnológicas! No me fío de esos artilugios. ¿En qué nos va a ayudar tu aparato?

 

-      Ya verás. Primero, tiene un sistema GPS que nos indicará el camino y por eso dejé los mapas de la ciudad en el hotel. Fíjate donde estamos, la cantidad de gente que hay, los avisos escritos en caracteres que no entendemos… Con esto estamos salvados.

-      Puede ser útil. De acuerdo. De todas formas no contarías con mi mal sentido de la orientación, ¿ah?

-      Vale. Ahora viene lo mejor. Tiene un sistema de reconocimiento de voz que escribe inmediatamente todo lo que le digo y enseguida lo puedo enviar por correo electrónico a cualquier lugar del mundo.

-      ¿Cuál es la gracia? ¿De qué nos va a servir en estas calles multitudinarias de Nueva Delhi?

-      Puede facilitarnos la comunicación con cualquier persona si nos encontramos en problemas. Imagínate que necesitamos dinero y queremos darle la orden a nuestro banco. Con este sistema nos comunicaremos fácilmente pues es más rápido que escribir.

-      Tengo mis dudas. Sigamos el paseo que hay mucho por visitar. Dicen que en este país se habla más de veinte idiomas y a pesar de que millones hablan inglés parece que ninguno de ellos anda por aquí.

-      Eso no es todo. Fíjate en lo bueno. Ahora con la cámara fotográfica integrada, el reconocimiento automático de caracteres y la traducción automática puedo tomar una foto de este aviso en hindi y en pocos segundos… Mira. Aquí lo tienes traducido al español. ¡Maravilloso! ¿No?

-      Vale. Vale. Si no hubiera otra posibilidad, hasta podríamos usarlo.

-      Espera, espera. Ahora está lo mejor. Digo algo en voz alta… «probando, probando, probando»… la máquina lo convierte en texto, oprimo este botón y ahora me llega traducido al hindi, oprimo este otro botón y… Oye bien.

-      «परीक्षण, परीक्षण, परीक्षण»

-      ¡Lo pronuncia por el altavoz!

-      No entiendo ni pío, pero seguro que debe de estar hablando en hindi.

-      ¿No me crees? Vamos a probarlo. Te lo voy a demostrar. «Por favor, ¿podría tomarme una foto con mi novia?» Ahora lo voy a traducir al hindi y se lo doy a escuchar al primer indio que pase. ¿A este joven por ejemplo?

-      «कृपया, तुम मेरी प्रेमिका के साथ एक तस्वीर ले सकता है?»

-      ¡A ver!

-      "बेशक. मुझे दे दो और उपकरण यह खुशी के साथ फ़ोटो ले लिया. "

-      ¿Qué dijo?

-      No sé, pero mi teléfono lo traducirá… Chito y oigamos…

-      «Claro que sí. Deme el aparato y le tomo la foto con mucho gusto.»

-      ¿Ves? Ahora le haré traducir esto. «Tome el aparato señor».

-      «उपकरण महोदय ले लो».

-      Sonriamos mientras nos fotografía… pero ¿qué hace? ¡No tiene por qué irse tan lejos! Pero… ¡ladrón, ladrón, ladrón!

-      ¡Ahora sí nos fregamos! Salió corriendo por allá y no habrá forma de alcanzarlo ni de reconocerlo en esta multitud de indios todos igualitos. Además no podremos regresar al hotel sin mapas, ni podremos preguntar el camino a nadie sin traductor de voz… ¡Tú, sí! ¿Cómo se dice tonto en hindi?

17:23 Anotado en Cuentos | Permalink | Comentarios (3) | Tags: humor, tecnología

miércoles, 19 enero 2011

Utopía

NV-IMP715.JPG-      Me voy a vivir a Utopía.

-      ¿Cómo? ¿Adónde?

-      Conseguí un trabajo con unos amigos utopianos que conocen al embajador de ese país y me voy a vivir allá.

-      ¿Existe ese país? ¿Dónde queda?

-      En África, creo que cerca del Burundá o del Ruandí.

-      ¡Ja, ja! Todo el mundo quisiera vivir en Utopía pero nadie lo consigue. Yo creo que tus amigos te están tomando del pelo.

-      No, señor. Son gente muy seria. Me dicen que es de los países más poblados del continente. Son pobres, viven de la agricultura, principalmente del café, no tienen petróleo, han sufrido hambrunas y guerras pero la gente vive feliz. El clima es variado, tienen montañas y bosques tropicales, son mayoritariamente católicos, tienen música, danzas y cantos muy bonitos; los vi en un DVD que me prestaron.

-      No puede ser. ¡Tú si eres ingenua! ¿Y en qué ciudad vas a vivir?

-      En la capital, Avisa Nena; creo que se llama así.

-      ¿Avisa Nena? ¡Vaya, vaya!... A ver. Muéstrame el DVD.

-      Aquí está.

-      ¡Ah!... ya entiendo. No es Utopía, sino ¡Etiopía!, niña.

viernes, 24 diciembre 2010

Navidad, Navidad, dulce Navidad

NV-IMP708.JPGQuerido Niño Dios:

Disculpa que te escriba tan tarde pero es que he andado súper ocupado y no me quedó tiempo ni de pensar en esta carta. Si andas demasiado ocupado, puedes dársela al Papá Noel, Santa Claus, los Reyes Magos o a cualquier reemplazante que me pueda atender. Todavía no es media noche. Creo que aún hay tiempo, ¿no?

Este año he estado muy juicioso. Trabajé como se debe, manteniendo la familia y ahorrando algo para los pasatiempos y el futuro incierto. Canté y aprendí canciones y algún villancico que seguramente te ha de gustar. Jugué scrabble en francés y español con mucha asiduidad, tratando de mejorar vocabulario y técnica para ocupar puestos más destacados en los campeonatos. Jugué ajedrez y creo que he mejorado a fuerza de perder con campeones. Estudié árabe quizás con menos juicio de lo pensado pero al fin y al cabo me aceptaron en nivel tercero avanzado para continuar este enero. Escribí y escribí mucho aquí y allá esperando divertirme y divertir a mis lectores. No he vendido muchos libros pero no pierdo las esperanzas. Practiqué gimnasia en el fitness tan a menudo como pude a pesar de que la báscula no quiere repercutirlo en baja de kilos y aumento de músculos. Pagué mis impuestos, di limosnas, no despilfarré la plata, fui a cine, viajé, charlé, reí y creo que no perdí el tiempo.

Claro que nadie es perfecto. Ni siquiera yo. Me dispute a veces con mi esposa, pero no más de lo normal en parejas viejas. Admiré el sexo débil, pero teniendo en cuenta el mirar y no tocar, para no caer en tentaciones. Envidié a uno que otro conocido que tuvo más suerte o éxito que yo, pero sin exageraciones. Más bien me sirvió de emulación.

En fin, creo que cumplí mi deber y por eso ahora puedo escribirte para pedirte mis regalos navideños.

¡A ver, a ver! Me gustaría que me regalaras un mundo sin guerra, sin pobres, sin injusticias. Sin guerra podríamos gastar ese dinero en cosas útiles en vez de balas y armas. Sin pobres, los ricos podrían disfrutas de su dinero sin remordimientos. Sin injusticias, nadie querría vengarse por su propia cuenta aplicando lo del ojo por ojo y diente por diente. ¡Mejor aún! Deberías también acabar con los ricos pues esos sí que despilfarran; van a terminar acabando el planeta como si fuera solo para ellos.

Deberías darnos un mundo donde todos seamos iguales. Todos calvos, gordos y arrugados como yo. Así no habría envidias. Deberías abolir las mujeres bonitas y los hombres buenos mozos para que no tuviéramos tentaciones y todo el mundo fuera fiel. A ver si repartes mejor el buen y mal tiempo. ¿Qué es eso de que en un lugar hayan lluvias sin cesar y en otros la gente se muera de sed por la sequía? Pues me gustaría que lloviera de noche y tuviéramos sol todos los días. Nada de temperaturas exageradamente altas o bajas. Una eterna primavera, por favor.

A los niños juiciosos siempre le traes los regalos que han pedido o alguna cosa que lo reemplaza como una naranja o mandarina. A ver si esta vez también te ocupas de nosotros los adultos. Si todos nos pusiéramos de acuerdo para pedirte paz en el mundo, sería maravilloso. Claro que hay tanto egoísta por ahí que algún cabrón se las arreglaría para pedir algo personal nada más. Peor aún; a un gracioso se le puede ocurrir pedir que los deseos de todos los demás no se cumplan. ¡Valiente gracia!

Bueno, yo con tanto pedir estoy demostrando mucho egocentrismo y egoísmo. Lo concedo. Pero pensándolo bien, un mundo perfecto sería muy aburrido. No habría noticias interesantes en los noticieros. Solo noticias buenas. Todo lleno de gente alegre, saludable, distendida, sin nada que envidiarle a nadie. No, a ese mundo le faltaría picante.

Está bien. Cambio de idea. Ahora voy a pedir algo que seguramente me puedes regalar. Te pido que nada cambie, que el mundo siga tal y cual, que mañana haya tantos pobres y ricos como antes. Hasta ahora a mí por suerte no me ha ido tan mal. Seguro que esto sí me lo vas a dar, ¿eh? Seguro que vivimos en el mejor de los mundos posibles.

Besos y abrazos.

Nelson

20:35 Anotado en Elucubraciones | Permalink | Comentarios (0) | Tags: cartas, sueños, humor