viernes, 06 mayo 2022
¿Cómo se escribe un diccionario?
El 21 abril pasado tuve la oportunidad de asistir a una charla, en el marco de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBO) y en la Universidad de los Andes, entre Alberto Gómez Font, filólogo y lingüista español, y Andrés Ospina, escritor colombiano. Fue interesante, amena e instructiva.
Conozco a Alberto desde hace un largo cuarto de siglo y aunque no nos hemos encontrado personalmente muchas veces, cuando tenemos esa oportunidad es como si nos acabáramos de ver y reanudáramos la charla interrumpida hace poco. Son de esas amistades que desafían el tiempo y la distancia. Un milagro de las telecomunicaciones, ya que nos conocimos en un foro de debate por la internet sobre el idioma español.
Andrés Ospina es más joven, de una generación que nos precede, parece más bien uno de mis sobrinos. Andrés llevó muy bien la charla preguntando, opinando o dando ejemplos de su propio diccionario de bogotanismos, ya que los dos tienen en común el haber participado a la escritura de diccionarios.
El hilo de la conversación se paseó por muchos temas de ambos lados del Atlántico y a través de muchos siglos. Las dos horas parecieron cortas y hubieran podido ser más. Se dieron muchos ejemplos de regionalismos, de definiciones sorprendentes, malentendidos por empleo de vocablos que son anodinos en un lugar, pero malsonantes en otros y varias anécdotas.
Recordé un léxico de palabras malsonantes que editaba la Agencia EFE para que los periodistas de la prensa, radio y televisión no fueran a meter la pata en alguna emisión internacional. Cuando lo descubrí en Ginebra, Suiza, hace más de treinta años, me daba risa al hojearlo pensar que para evitar esos términos los pobres locutores se podrían quedar sin palabras.
Se habló entre otras cosas de los colombianismos exosto y flux. El primero viene del inglés exhaust pipe y se usa comúnmente en Colombia para referiste al tubo de escape de los automóviles. Está tan arraigado que a nadie se le ocurre que en otros países no lo entiendan.
Flux es particular pues se aplicaba a los vestidos de hombre de tres piezas (pantalón, saco y chaleco) de un solo color y que se visten cada vez menos. En la sala nadie conocía el origen, pero alguien sugirió que podría venir del árabe o turco, pues en la ciudad vieja hay una calle donde se instalaron los turcos que inmigraron desde finales del siglo XIX para vender telas y paños o confeccionar trajes. A Alberto no se le ocurrió ninguna palabra árabe relacionada. A mí, después de la charla y ya en casa, se me vino la palabra فلوس que se pronuncia /fulús/ y quiere decir dinero sin imaginarme una relación lógica con el traje. Como muchos de los llamados turcos eran en realidad libaneses, le pregunté a mi amigo Georges si veía alguna palabra relacionada con el tema en árabe libanés y de pronunciación similar. Me contestó: la única idea que se me ocurre es que quizás sea la deformación de la palabra جوخ /Joukh/ la que designa la tela que se usa para los trajes de hombre y la calle de los diseñadores en Beirut se llamaba Souk el Joukh (nuestros primeros trajes (para Spiro y para mí) alrededor de los 14 años los hizo un diseñador de esta calle). Concluyo que nos toca aceptar lo que indican unos diccionarios, es decir que proviene del francés flux y se usa (o usaba) en varios países sudamericanos.
Sobre la evolución del idioma se mencionó que posiblemente entenderíamos a los contemporáneos de Cervantes si pudiéramos viajar al pasado, pero quizás ellos no tanto a nosotros. Lo curioso de nuestra lengua es que ha sido más estable en su pronunciación y ortografía que otras. Los franceses no entienden muy bien a Rabelais, ni los ingleses a Shakerpeare en sus versiones originales siendo contemporáneos con Cervantes. Nosotros tenemos la suerte de poder leer El Quijote sin mucha necesidad del diccionario. Moliere que llegó un siglo después escribió con el lenguaje de la calle y por eso hoy todavía se entiende. Es más, en francés se dice que este idioma es la lengua de Moliere. Curioso.
La conocida relación de topónimos y apellidos fue otro tema interesante. Mi apellido, por ejemplo, viene de un pueblo vasco y en vascuence lo común es que los apellidos se originan no solo de un pueblo, sino de una casa familiar en particular. En Francia y España, conozco muchos lugares que han dado lugar a apellidos, pero en Colombia no es el caso. Tenemos muchos nombres de ciudades y pueblos que vienen de nombres extranjeros: Madrid, Antioquia, Armenia, Medellín, Líbano, etc. También hay muchos topónimos de origen indígena como Ibagué, Bogotá, Calarcá, Cajamarca, etc. Los apellidos nos llegaron de España u otros países y quedaron pocos apellidos indígenas, aunque los hay. Por eso cuando viajo por España, en vez de reconocer nombres de pueblos, recuerdo apellidos que se dan en Colombia: Soria, Cáceres, Burgos, Cuenca, Sevilla, etc.
Se habló también de las palabras nuevas en el diccionario y de las más raras que desaparecen del diccionario. Comenté que una palabra que salió del diccionario de la RAE (o de la Asociación de Academias), como entrada propia y no hace mucho, es la preposición latina in, que sigue presente en varias locuciones como in articulo mortis, in fraganti o in extremis. La extraño porque era muy útil jugando scrabble y ahora no la podemos formar (son las reglas del juego). Quizás regrese, pero por el inglés in.
El vocabulario marinero dio lugar a divertidas definiciones en las que uno no entiende ni papa por estar llenas de palabras desconocidas del común de los mortales. Eso me recordó las palabras raras con que me he topado jugando scrabble, tanto en francés como en español, que son útiles para el juego, pero que casi nadie comprende. Me he inventado un juego para retenerlas y es inventarme textos con esos vocablos extraños. Aquí dejo para Alberto un ejemplo que escribí hace poco:
"Te voy a engrillar si metes otra vez la mano en ese huacal lleno de cobos", dijo el padre befando a su rorro. El niño se alejó prudentemente, pero con la curiosidad intacta. "No te asustes. Cuando vendamos todo en el mercado, te ganarás de hoque un inti para coleccionar. Me parece que estás creciendo tan rápido como cuando el trigo se grilla", añadió riendo. Zaceó a los perros y siguió estuchando sus artesanías. "Si tenemos suerte, estaremos presentes cuando la guardia preguste al rey a su llegada", concluyó. El niño se quedó juicioso pensando, sin atreverse a preguntar qué significaba todo eso.
En fin, el tema es largo y sustancioso. Ojalá podamos vernos otra vez con Alberto en cualquier rincón del mundo, ya que él es un gran viajero y yo trato de serlo. También sería grato asistir a alguna conferencia de Andrés Ospina o leer sus libros.
05:41 Anotado en Lengua, Libros | Permalink | Comentarios (3) | Tags: idioma, diccionario, español
martes, 02 diciembre 2014
La Raison par Alphabet
Hace dos semanas estuve viendo esta pieza de teatro. Es difícil ver una unidad en el texto ya que está compuesto de definiciones escritas por Voltaire para la enciclopedia. Están bien escogidas por ser sarcásticas, burlonas e irónicas. Los actores mantienen muy bien el interés de los espectadores gracias a su interpretación desfasada y exuberante. Es divertida aunque por momentos sea repetitiva y loca. Como ejercicio de actuación me parece bien hecha. El texto resuena con la actualidad a pesar de los siglos que han pasado.
La Raison par Alphabet
Spectacle vivant
Un spectacle à l’allure déjantée
Du jeudi 13 au dimanche 16 novembre 2014, 20h30, dimanche 17h
Comédie de Ferney
Présenté en avant-première lors de la Fête à Voltaire, ce spectacle est tout à la fois drôle, étonnamment actuel et brillant.
Paru en 1764, le Dictionnaire philosophique fut remanié à plusieurs reprises. Il parut en 1769 sous un nouveau titre, La Raison par alphabet, avant d’être fusionné au XIXe siècle avec les Questions sur l’Encyclopédie, publié dès 1771. De ce manifeste évolutif et multiforme, construit comme un livre de combat, Thomas Freitag – récemment remarqué dans Le Roi se meurt – tire les articles et les dialogues les plus ciselés.
Qu’il s’agisse de superstitions, d’histoire(s), de dogmes, de récits ramenés à la légende ou plus généralement des travers du genre humain, les deux comédiens donnent à entendre et à voir l’une des plus grandes réussites littéraires et philosophiques du patriarche de Ferney. Le ton est enlevé, le style percutant. La preuve qu’à 250 ans de distance, le rire reste la meilleure arme contre la bêtise et le fanatisme.
Spectacle tout public. Durée : 1h15
http://www.ferney-voltaire.fr/TPL_CODE/TPL_EVENEMENT/PAR_TPL_IDENTIFIANT/355/113-evenements.htm
21:53 Anotado en Teatro | Permalink | Comentarios (0) | Tags: voltaire, ferney, diccionario
sábado, 02 enero 2010
Manderecha y manizquierda
No sabía que en el Diccionario de la Real Academia Española hay una entrada par manderecha, pero no para manizquierda. No sé si es por la pronunciación que a mí me parece haber oído la segunda mucho más que la primera. Recuerdo a mi papá y creo que también a mi abuelo indicando direcciones o sitios, como «está a manizquierda» o «hay que voltear a manizquierda».
En el sitio Web de la Real Academia Española se puede consultar las bases de datos que contienen millones de registros desde los orígenes del español hasta nuestros días. En los de los últimos veinticinco años no aparece ninguna de las dos palabras, pero en documentos más antiguos si están pero no en muchos.
Manderecha aparece 119 veces en 48 documentos; manizquierda solo están estas cuatro que además son antiguas:
1 las postrimeras palabras, súbitamente tronó de la manizquierda, por el aire sonando. E del çielo paresç ** 1427 - 1428 Villena, Enrique de Traducción y glosas de la Eneida. Libros I-III ESPAÑA 12.Relato extenso novela y otr Pedro M. Cátedra, Turner Libros (Madrid), 1994
2 o tomar un poco a manderecha y dejar a Pitregua a manizquierda. PALATINO También me huelgo de no pasar ** c 1550 Arce de Otárola, Juan de Coloquios de Palatino y Pinciano ESPAÑA 12.Relato extenso diálogo y mi José Luis Ocasar Ariza, Turner (Madrid), 1995
3 ente, y la manderecha mediodía, y la puerta de la manizquierda de la estancia del capitán la puerta del ** 1536 Salazar, Diego de Tratado de Re Militari ESPAÑA 16.Ejército y ciencia militar CORDE, Real Academia Española (Madrid), 2003
4 deras. En los lados y trasera de los quadros de a manizquierda alojaría por la misma orden y cuenta los ** 1536 Salazar, Diego de Tratado de Re Militari ESPAÑA 16.Ejército y ciencia militar CORDE, Real Academia Española (Madrid), 2003
5 de los españoles que a las nuestras. Ese otro de manizquierda sube arriba ácia la Imperial, y así me p ** 1673 Núñez de Pineda y Bascuñán, Francisco El cautiverio feliz CHILE 19.Historiografía Diego Barros Arana, Imprenta del Ferrocarril (Santiago de Chile), 1863
6 el suelo. Y luego que hayays entrado volvereys á manizquierda, hallareys luego un estrado con la escal ** c 1445 - 1519 Anónimo Cancionero de obras de burlas provocantes a risa ESPAÑA 21.en obras colectivas Luis Sánchez (Londres), 1841 - 1843
Por otro lado, manderecha aparece en la edición del diccionario de la Academia desde 1803, pero manizquierda nunca ha estado.
En Google, encuentro manderecha sin "mano derecha" en 3260 páginas en español (de las cuáles 1340 corresponden a la expresión "buena manderecha"; un poco más de la mitad), pero manizquierda sin "mano izquierda" aparece en 40 páginas en español. Supongo que manderecha se usa más porque significa también buena suerte y que por esta razón sigue en el DRAE.
Aunque es normal y sucede a menudo, me parece tan raro saber que una palabra como manizquierda haya sobrevivido oralmente hasta hace unos años en Colombia y puede que siga usándose sin dejar huella en el diccionario.
08:00 Anotado en Lengua | Permalink | Comentarios (1) | Tags: diccionario, palabras en desuso, español