domingo, 15 noviembre 2009
Encuentro fantástico (3)
Camino de la biblioteca central donde esperaba encontrar un lugar tranquilo para leer un poco a Dostoievsky, me crucé con Karina. Estaba furiosa pues había perdido el libro de psicología y lo necesitaba para su examen. La vi tan contrariada que me dieron muchas ganas de ayudarla. Le propuse acompañarla. Dijo que seguramente se le había quedado en la cafetería de su facultad donde estuvo antes de ir a la biblioteca. Lo bueno de estar con ella además de pasar un rato agradable era poder conocer a sus amigas de microbiología entre las cuales había muchas mujeres bonitas. Karina me gustaba pero además de que era madre soltera y la perspectiva de tener que lidiar con hijos de otro no me interesaba, ya estaba muy ennoviada con Emilio, un venezolano que, al contrario de mí, tenía mucho éxito con las chicas.
Durante una huelga universitaria nos hicimos muy amigos los cuatro: Karina, Emilio, Alejandro y yo. Sin proponérnoslo los tres andábamos detrás de ella y solo uno fue el elegido. Nos conocíamos desde la clase de algebra lineal en la que nos tocó lidiar con multiplicación de matrices entre otras operaciones de cálculo vectorial. Creo que fue esa materia la que me hizo pasarme de ingeniería industrial a derecho.
Mientras caminábamos entre los altos eucaliptos aproveché para cambiar de lado los libros escondiendo los títulos para evitar chistes idiotas como los de Alejandro. Por más de que estábamos acostumbrados a subir y bajar escaleras todo el día a 2600 metros de altitud, dada la velocidad con la que andábamos, llegamos jadeantes al edificio de Las Monjas. La cafetería olía a café y cigarrillo. En un rincón del fondo estaba Emilio jugando ajedrez con otro estudiante que yo no conocía. Cerca de la puerta un grupo de cinco o seis muchachas estaba en plena conversación. «¡Oye!, Pedro. Ven a intercambiar chistes con nosotras. ¡Je, je, je!», me dijo una de ellas. Claro, contando chistes yo sí tenía éxito y era un buen truco para conocer nuevas amigas. «Ahora vuelvo», les contesté.
Karina miró por todas partes sin encontrar su libro y luego me dijo: «¿Será que me lo robaron?». «Si no hubo violencia ni intimidación, no hubo robo. En tu caso podría tratarse de hurto que tiene menos gravedad desde el punto de vista del derecho. Es posible que lo hayas perdido y alguien te lo entregue o lo deje en la biblioteca», expliqué. «¡Tú y tu terminología de leguleyo. Para mí es igual. No tengo el libro ahora y lo necesito para el examen. ¡Maldita sea! Me tocará pedir prestado uno en la biblioteca», exclamó. La dejé ir sola a preguntar al responsable de la cafetería y la vi acercarse a Emilio que estaba muy concentrado en sus jaques y mates.
Me uní al grupo de amigas de las cuales en realidad solo conocía a dos. «Pedro, échate uno de esos chistes de pastusos que te sabes», dijo Beatriz. «A ver, ¿por qué los pastusos usan solamente la letra te en sus agendas de teléfono?», pregunté. Después de pocos intentos infructuosos de respuesta, les contesté: «Pues porque escriben teléfono de Antonio, teléfono de Joaquín, teléfono de Manuel, etc.». Cuando se calmaron las risas, añadí enseguida: «Se muere el marido de una pastusa y se acerca un amigo a la viuda y le dice: lo siento. Ella contesta: No, mejor déjalo acostado». También conté este: «dos pastusos vinieron a Bogotá a comprar un carro. Preciso compraron uno Volkswagen. Cuándo regresaban e iban por Cali, el carro se les apagó. Uno se bajó a revisar el motor y cuando abrió la parte de adelante, dijo: Oiga, nos robaron el motor. El otro abrió la parte de atrás y dijo: No, qué brutos, ¡si nos hemos venido en reversa!». Así pasamos un rato contando chistes yendo poco a poco a los más verdes, pues en el grupo había un par de muchachas muy divertidas que no se quedaban atrás y contaban unos más subidos de color.
Por fin cambiamos de tema para hablar de las clases, de los profes, de las próximas vacaciones y de los planes para el fin de semana. «¿Quieres ir con nosotras a una fiesta el sábado próximo?», preguntó Beatriz. «Pero solamente si llevas a tus amigos Alejandro y Emilio», dijo otra, muy descarada e interesadamente.
En esas quedamos. Me dieron las señas del lugar, una residencia de universitarios entre la universidad Javeriana y la clínica Marly, quedamos de llamarnos el sábado para darnos cita en un lugar cercano. Viendo la hora avanzada y la urgencia por adelantar la lectura de mis libros, decidí irme a almorzar a casa, ya que estaba claro que si me quedaba en la universidad no iba lograr a concentrarme. Ni siquiera me di cuenta cuando Emilio y Karina salieron de la cafetería. Ya tendría tiempo de llamarlos para proponerles el plan de rumba pactado.
sábado, 14 noviembre 2009
El Niño Pez
Esta es la segunda película de la argentina, Lucía Puenzo, directora de XXY, en la actúa la misma actriz, Inés Efron. Está bien aunque un poco enredada ya que no sigue el hilo cronológico de la narración y hay que estar muy pendiente para no perderse en el laberinto espacio-temporal. Las dos actrices principales se desempeñan muy bien. La película me pareció un poco larga hacia el final, como si no lograra encontrar la forma de terminarla. Tiene un final abierto. Lo peor fue que en el cine la cinta se rompió faltando muy pocos minutos del fin y nos tocó esperar a que la repararan y pudiéramos oír las últimas tres frases. El tema general es la adolescencia, el incesto, el acoso sexual, la homosexualidad femenina, la identidad, las relaciones entre dueños de casa y empleados del servicio, la inmigración paraguaya. Me pareció bien tratada, con toques de fantasía, buena fotografía y su dosis de suspenso. No está mal aunque me gustó más XXY.
El Niño Pez
Date de sortie cinéma : 6 mai 2009
Film disponible en DVD le : 18 novembre 2009
Réalisé par Lucia Puenzo
Avec Inés Efron, Mariela Vitale, Pep Munne
Long-métrage espagnol, argentin, paraguayen. Genre : Thriller, Drame, Romance
Durée : 1h36 min Année de production : 2008
Synopsis : Lala, fille de bonne famille dans la banlieue cossue de Buenos Aires, est follement amoureuse de la Guayi, jeune et jolie paraguayenne au service de ses parents. Ensemble, elles rêvent de partir dans le village d'origine de Guayi, au bord du lac Ypoà. Mais un drame familial va brusquement les séparer...
08:00 Anotado en Películas | Permalink | Comentarios (1) | Tags: cine, argentina, festival filmar
viernes, 13 noviembre 2009
Puisque nous sommes nés
Este documental muestra la vida de unos niños brasileños que están entrando a la adolescencia y quieren salir adelante a pesar de su pobreza. Todo gira alrededor de una estación de gasolina al borde de la autopista. Está filmada sin entrevistas ni comentarios. Los diálogos son los de los personajes. El sonido es el del ambiente ya sea el viento, los automóviles, los animales, la televisión o los altavoces de la gasolinera. Sumerge al espectador en ese mundo y en esa problemática tan universal. No se ve violencia física pero la violencia de la sociedad está muy presente. No se imagina uno cómo lo hicieron pues los diálogos no parecen preparados en absoluto y a menudo son muy íntimos y conmovedores. Los directores Andréa Santana, brasileña, y Jean-Pierre Duret, francés, han logrado un filme muy auténtico, filmado con cámara digital y pasado a película de 35 mm. ¿Cuánto tiempo habrán pasado en medio de esta pobre gente? Me parece muy efectivo como crítica de nuestras sociedades y de la injusticia del mundo. Sería muy bueno que los niños y jóvenes lo vieran para que fueran concientes de suerte y no desperdicien sus propias oportunidades.
Puisque nous sommes nés
Date de sortie cinéma : 4 février 2009
Réalisé par Jean-Pierre Duret, Andréa Santana
Long-métrage français, brésilien. Genre : Documentaire
Durée : 1h30 min Année de production : 2008
Synopsis : Brésil. Nordeste. Une immense station-service au milieu d'une terre brulée, traversée par une route sans fin. Cocada et Nego ont 13 et 14 ans. Cocada a une rêve, devenir chauffeur routier. Il dort dans une cabine de camion et, la journée, il rend service et fait des petits boulots. Son père est mort assassiné alors il s'est trouvé un père de substitution, Mineiro. Un routier qui prend le temps de lui parler et de le soutenir quand la tentation de l'argent mal acquis se fait trop forte. Nego, lui, vit dans une favela, entouré d'une innombrable fratrie. Après le travail des champs, sa mère voudrait qu'il aille à l'école pour qu'il ait une éducation mais Nego veut se sortir de là, gagner de l'argent. Le soir, il rôde à la station, fasciné par les vitrines allumées, les commerces qui vendent de tout, la nourriture abondante. Avec son copain Cocada, ils regardent le mouvement incessant des camions et des voyageurs. Tout leur parle une langue dont ils n'en savent rien. Avec cette singulière maturité qu'on acquiert trop tôt dans l'adversité, ils s'interrogent sur leur identité et leur avenir. Leur seule perspective : une route vers Sao Paulo, vers un ailleurs.
08:00 Anotado en Películas | Permalink | Comentarios (0) | Tags: cine, brasil, francia, festival filmar