viernes, 16 julio 2010
Castillo de Voltaire
Me gusta la fiesta del 14 de julio en Ferney-Voltaire pues tiene un ambiente muy familiar. Siempre hay público de todas las edades. Este año la novedad fue el sitio. Por primera vez se organizó en los jardines del Castillo de Voltaire y con la buena suerte de que el tiempo estuvo clemente. Después de un día caluroso, la velada estuvo fresca y sin lluvia que era la principal amenaza. Conversé con muchos amigos y conocidos que estuvieron allí. Lo extraordinario fue ver desde lejos a un señor ir furioso a buscar a su esposa en la pista de baile y llevársela de los brazos de su pareja de rocanrol que quedó completamente sorprendido. Los vimos pasar discutiendo furiosos hacia la entrada del castillo, la persona que bailaba con ella era un amigo que estaba en nuestra mesa y que pronto vino a contarnos lo que le había pasado. A los pocos minutos vimos a la señora regresar a la pista de baile sola y al pasar frente a nuestra mesa la vimos sonreír como si nada. El resto son suposiciones. ¿Habría dejado al marido esperándola con sus hijos necios? ¿Al hombre no le gusta bailar y le es insoportable ver a su mujer en brazos de otro? ¿Se estaba ella desquitando y echando unas canitas al aire para volver al día siguiente a la rutina de ocuparse como una buena ama de casa de su maridito? En fin, se puede no inventar cualquier cuento.
08:00 Anotado en Recuerdos | Permalink | Comentarios (1) | Tags: fiesta popular, fiesta nacional
jueves, 08 julio 2010
Ireneo, el nada olvidadizo
«Me parece muy feliz el proyecto de que todos aquellos que lo trataron escriban sobre él», Borges, 1942
Mi hermana Inés me recuerda al personaje de Borges que tenía una memoria increíble. Hace poco hablando con ella por teléfono le dije que hacía ya como dos años que no iba a Colombia. Me contestó, sí la última vez ustedes llegaron un 13 de diciembre. Le creo sin dudarlo. Ella se sabe de memoria los cumpleaños de todos los miembros de la familia, vivos y muertos. Los números telefónicos también los memoriza sin problema. Recuerda lo que pasó en muchas fechas con mucho detalle.
No me quejo de tener mala memoria pero hay cosas que olvido fácilmente. Me consuelo pensando que son cosas sin importancia o que no les pongo cuidado. Dicen que con los años uno recuerda muy bien lo que pasó hace tiempo y olvida rápidamente lo sucedido hace poco. Afortunadamente la mente es selectiva y tratamos de quedarnos con los mejores recuerdos.
Parece que Funes disfrutó de sus cortos años de vida gracias a su súper memoria. Me gustaría tener una muy buena memoria pero si pudiera borrar lo inútil como cuando uno limpia el disco duro del PC. Lo peligroso es que lo que ayer parecía inútil hoy puede no serlo. Por eso en el mundo informático hay programas que recuperan información borrada o que la policía logra desenterrar información de un disco duro que el dueño creía limpio de sospechas.
El funcionamiento de la mente siempre me ha impresionado e interesado. Cuando juego scrabble, por ejemplo, a veces encuentro palabras que nunca uso y que sin embargo están ahí escondidas en algún rincón del cerebro esperando a que las necesitemos. Es como si tuviéramos compartimientos para cada cosa y con apenas un olor, un color o una sensación particular revivieran de repente. Parece en todo caso que mi hermana es otra prima (colombiana) de Funes.
- El primo ruso de Funes el memorioso, José Gordon, Revista de la Universidad de México, No 18, Agosto 2005, http://www.revistadelauniversidad.unam.mx/1805/pdfs/108-1...
- Funes el memorioso, Jorgé Luis Borges, Revista Artificios, 1944, http://www.literatura.us/borges/funes.html
09:11 Anotado en Recuerdos | Permalink | Comentarios (0) | Tags: memoria, borges
viernes, 11 junio 2010
Mundial de fútbol
El recuerdo más antiguo que tengo de un Mundial de Fútbol es de 1962. Creo que era en Chile, cuando Colombia casi le gana a la Unión Soviética y se inventaron eso de que CCCP quería decir «con Colombia casi perdemos». Mi hermano estaba con un amigo del barrio escuchando un partido en la radio del carro de mi abuelo dentro del garaje. Me acerqué a ver qué pasaba y me enteré del campeonato. No he sido aficionado al fútbol, pero cada cuatro años termino viendo más partidos que durante los cuatro años que lo preceden.
En 1966 fue la primera vez que se transmitió por televisión. Recuerdo las imágenes en blanco y negro y los partidos que veíamos en familia y con amiguitos del barrio en la casa de unos y otros. En 1970 yo estaba en el colegio y me encantó; fue la vez que Brasil ganó con un equipo maravilloso en México. En el 74 ya no me acuerdo bien cómo pasó, pero yo ya estaba en la universidad en Bogotá. En el 78 sucedió cuando estaba preparando mi viaje a Francia. Vi la final en París con tanto sueño por el cambio de horario que los recuerdos son una mezcla de imágenes en una residencia de estudiantes con un equipo holandés color naranja que corría como loco mientras yo dormía y me despertaba a cada grito de los presentes.
En el 82 estaba en Praga en una conferencia de lingüística computacional. Vi algunos partidos en el bar del hotel en medio de gritos de mucha gente. Del 86 ni el 90 tengo recuerdos precisos. En el 94 ya estaba trabajando en Ginebra y recuerdo el partido de Colombia contra Estados Unidos en el que un colombiano hizo un autogol y a los pocos meses murió violentamente al salir de una discoteca en Medellín. En el 98 fue Francia el campeón y el día de la final no pude verla porque se varó mi carro y mientras venían los del TCS a ayudarme, se pasó el partido. Del 2002 no recuerdo nada en particular. Del 2006 recuerdo que el día del cabezazo de Ziddanne al jugador italiano, estábamos viendo el partido en un hotel de Taxco, México. ¡A ver qué recuerdos me quedarán del de este año en Suráfrica!
12:05 Anotado en Recuerdos | Permalink | Comentarios (5) | Tags: fútbol, deporte, campeonato